2 de Cronicas 17:1 Reinado de Josafat. Reinó en su lugar Josafat, su hijo, el cual se hizo fuerte contra Israel.[a]
En 2 de Crónicas se hace un recuento más detallado y sistemático del reino de Josafat que 1 Reyes. Sin embargo, 2 Reyes relata la coalición de Josafat con el hijo de Acab, Joram, y la milagrosa historia del valle de los estanques (2 R 3), mientras 2 Crónicas no lo hace. Véanse el texto y las notas a 1 de Reyes 22:1-50, y compárese con 2 de Crónicas 17-20. Como cuarto rey de Judá, Josafat representaba a una potencia con la cual había que contar por el ejército, las fortalezas y los bienes que poseía. Uno de sus más importantes logros (no mencionado en 1 Reyes) fueron los equipos de maestros que envió a enseñar la Ley.
2 de Cronicas 17:2 Puso ejércitos en todas las ciudades fortificadas de Judá y colocó gente de guarnición en tierra de Judá, y en las ciudades de Efraín que su padre Asa había tomado.
2 de Cronicas 17:3 Jehová estuvo con Josafat,[b] porque anduvo por los caminos que anteriormente había seguido David, su padre; no buscó a los baales,
2 de Cronicas 17:4 sino que buscó al Dios de su padre y anduvo en sus mandamientos, no según las obras de Israel.
2 de Cronicas 17:5 Por tanto, Jehová confirmó el reino en sus manos; todo Judá traía a Josafat presentes, y tuvo riquezas y gloria en abundancia.
2 de Cronicas 17:6 Se animó su corazón en los caminos de Jehová, y quitó los lugares altos y las imágenes de Asera[c] de en medio de Judá.
2 de Cronicas 17:7 Al tercer año de su reinado envió a sus príncipes Ben-hail, Abdías, Zacarías, Natanael y Micaías, para que enseñaran en las ciudades de Judá.
El pueblo de Judá era completamente ignorante de las cuestiones bíblicas. Nunca se había tomado el tiempo para escuchar o discutir la Palabra de Dios y comprender cómo podría cambiar su vida. Josafat se dio cuenta que conocer la Palabra de Dios era el primer paso para hacer que el pueblo comenzara a vivir como debía, así que inició una educación religiosa a todo lo largo de la nación. Revirtió la decadencia religiosa que ocurrió al final del reinado de Asa al colocar a Dios en primer lugar en la mente del pueblo y al infundirle un sentimiento de compromiso y de misión. Debido a esta acción, la nación comenzó a seguir a Dios. Las iglesias y las escuelas de hoy necesitan sólidos programas de educación cristiana. Para llevar una vida de acuerdo con los propósitos de Dios, es esencial que tengamos una buena enseñanza bíblica a través de la Escuela Dominical, la iglesia, los estudios bíblicos y los devocionales personales y familiares.
2 de Cronicas 17:8 Con ellos envió a los levitas Semaías, Netanías, Zebadías, Asael, Semiramot, Jonatán, Adonías, Tobías y Tobadonías, y también a los sacerdotes Elisama y Joram,[d]
2 de Cronicas 17:9 los cuales enseñaron en Judá, llevando consigo el libro de la ley de Jehová; y recorrieron todas las ciudades de Judá enseñando al pueblo.[e]